Es más cómodo viajar con nuestro automóvil particular que depender del transporte público. ¿Pero cada familia necesita un coche, o es un lujo prescindible? ¿Cómo podemos saber si comprar un coche es la opción ideal? Con los siguientes consejos podremos descubrir si, en nuestro caso particular, es fundamental tener coche.
¿Necesitas tener coche, o solamente es un deseo?
Piensa en las ventajas e inconvenientes de ambas opciones, transporte privado y público. En el metro evitas atascos y los gastos de gasolina, el seguro, las reparaciones y posiblemente alguna multa inesperada.
Piensa en el tiempo que debes dedicar a cada opción. En el transporte público es posible que ahorres tiempo que gastarías buscando un lugar donde aparcar. Además, tener coche también requiere un lavado semanal.
En cambio, si en tu entorno es difícil viajar en metro, tren o autobús, el coche sería preferible.
No solamente es importante tener en cuenta el gasto económico que nos supone adquirir un vehículo en comparación con un abono de transportes para viajar en metro con mucha frecuencia, sino también el gasto medioambiental que supone añadir a la carretera un coche adicional, en comparación con el gasto mínimo que supondría viajar en transporte público.
Ten en cuenta, además, que el mantenimiento va a ser más caro a medida que pasen más años porque el vehículo necesitará más reparaciones.
Si has elegido tener coche, presta atención a los sencillos consejos para contaminar menos.
1. Siempre que sea complicado viajar en coche, como por ejemplo para llegar al centro de Madrid, elige el transporte público.
2. Si vas a llegar al mismo destino que otras personas, como por ejemplo tus compañeros de trabajo, podéis compartir el gasto en gasolina y reducir la contaminación al viajar en el mismo coche, encontrando la ruta ideal para recoger a cada compañero.
IMAGEN de: Philipp Lücke