Los delfines son altamente inteligentes. Existen cuarenta especies que son muy diferentes entre unas y otras.
No dudamos de su inteligencia. Se cuidan entre ellos si tienen heridas o están enfermos, e incluso en casos extremos pueden ayudar a otro delfín a subir para poder respirar.
Estos animales son diez veces más fuertes que los atletas olímpicos que ganan premios. Son capaces de recordar a sus compañeros durante años.
Características de los delfines
Nadan a gran velocidad, ven muy bien dentro y fuera del agua, oyen frecuencias diez veces por encima de nuestro límite superior y tienen muy desarrollado el sentido del gusto, pues prefieren algunos alimentos a otros.
Pueden crear hasta tres tipos de sonidos diferentes: los silbidos, los sonidos de frecuencia modulada y los chasquidos. Los delfines se comunican entre ellos creando sonidos con las vibraciones del tejido conectivo.
Una de las imágenes más curiosas y bellas que tenemos de estos animales es la forma en la que saltan por encima del agua y hacen acrobacias, que podrían hacer para encontrar los bancos de peces ya que de esta manera ven dónde están los grupos de aves que los buscan. También podrían hacer acrobacias para comunicarse con otros grupos de delfines o para divertirse.
Son muy sociables, y lo podemos notar sobre todo viendo cómo forman grupos de hasta doce delfines.
El conocido delfín de Maui, o Cephalorhynchus hectori maui, mide 120 centímetros y pesa 40 kgs.
Comentamos las características de estos simpáticos animales porque es una pena que la gran mayoría de los enemigos de los delfines sean los propios humanos. Salvo algunos tiburones grandes, el ser humano es el responsable de la muerte de muchos delfines. Usan pesticidas, metales pesados, plástico, pesca y redes.
IMAGEN de: E-nat