Advierten sobre peligros ecológicos del maíz transgénico en México
La polémica por el maíz transgénico ha llegado a México. El gobierno local autorizó quince solicitudes para cultivar maíz genéticamente modificado, una decisión que para distintos académicos y grupos ambientalistas podría ser muy negativa para la ecología de muchas regiones del país, por el efecto que tendría sobre los cultivos originarios.
Tras once años de vacío político, el gobierno mexicano aprobó el desarrollo de algunos proyectos para sembrar maíz transgénico en zonas agrícolas de ese país americano. Aunque este tipo de maíz tiene ventajas en lo relativo a cuestiones productivas, acarrea, por otro lado, un fuerte riesgo de causar graves perjuicios ecológicos.
El maíz transgénico es aquel al que se le introducen artificialmente características biológicas nuevas provenientes de otras especies vegetales, animales o bacterias. Esto permite que los cultivos adquieran propiedades inusitadas en las variantes naturales, como por ejemplo una mayor resistencia al uso de herbicidas o al ataque de plagas.
De acuerdo con muchos especialistas, el maíz transgénico está íntimamente relacionado con la aparición de propiedades indeseadas en estos cultivos, como por ejemplo alergias o resistencia a antibióticos en los consumidores, muerte de insectos que no son dañinos y contaminación por polinización de especies nativas de maíz en cuanto a las áreas de cultivo.
Pérdidas irreparables de especies locales
Teniendo en cuenta esto, en México se teme perder el genoma de las especies de maíz originarias de la región, debido a la contaminación provocada por los transgénicos. Según los expertos del Instituto de Ecología de la Universidad Nacional Autónoma de México, «resulta imposible aislar los cultivos modificados de las variedades autóctonas, sobretodo por las características de nuestra región. En consecuencia, el daño puede ser irreversible».
Según los propios especialistas mexicanos, en muchos países se han prohibido estas prácticas debido al riesgo que supone para las especies originarias. Sin embargo, las autoridades políticas mexicanas defienden su derecho a promocionar nuevas actividades económicas en el país, y aseguran tomar todo tipo de precauciones para proteger los cultivos locales.
En principio, se desarrollaría una fase experimental de cultivos transgénicos para constatar si el riesgo de eliminar especies autóctonas es real. Sin embargo, las organizaciones ecologistas creen que incluso en una fase previa pueden llegar a darse casos de pérdidas irreparables sobre las variantes locales. ¿Vale la pena poner en riesgo un recurso de las generaciones futuras y el patrimonio natural del país para satisfacer una necesidad económica actual?
Foto de flydime en Flickr
Add A Comment