En Ecogestos nos gusta facilitaros herramientas que podáis utilizar en vuestro día a día. Un tema que nos ha preocupado a todos alguna vez es la compra de nuevos electrodomésticos para nuestro hogar. En tiempos de crisis, miramos mucho que estos gastos no desborden nuestra maltrecha economía. Para paliar sus efectos, disponemos de dos opciones: a) días atrás os hablábamos de las ayudas que podemos pedir a las administraciones públicas en las que se incluyen la renovación de electrodomésticos y calderas; b) el plan renove de electrodomésticos que pretende retirar los viejos sin etiqueta energética y substituirlos por unos más eficientes.
Otros elementos que tenemos en cuenta a la hora de adquirir un nuevo aparato son el tamaño o el diseño. A parte de estas vertientes hemos de considerar el factor medioambiental, en concreto el consumo energético y el gasto de agua. En este punto sería interesante comprobar qué consume nuestro modelo actual.
¿Qué es el etiquetado energético?
En 1989 la Comisión Europea puso sobre la mesa un nuevo mecanismo para potenciar la utilización racional de la energía mediante la creación del etiquetado energético. Esta etiqueta que se puede ver en los electrodomésticos sirve para indicar el nivel de ahorro de energía en relación a otra categoría similar y entre equipos de las mimas características. La gradación utilizada oscila entre el nivel A (más alto) y el G (más bajo). Dentro del primero, ya existen subdivisiones, como A+, A++ y A+++ que son más elevadas y empleadas para frigoríficos, congeladores y combinados. Para establecer el nivel que le corresponde a cada electrodoméstico se contabiliza el consumo anual. Su uso es obligado en frigoríficos, congeladores, lavadoras, lavavajillas, secadoras, lavadoras – secadoras, fuentes de luz domésticas, horno eléctrico y el aire acondicionado. Para ampliar la información sobre el gasto energético, os recomendamos visitar la Guía práctica de la energía: consumo eficiente y responsable de electrodomésticos publicada por el Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE).
¿Cómo identificar un electrodoméstico eficiente?
Cuando estemos en la tienda el primer punto sería mirar la etiqueta energética. La elección variará en función del nivel (A – G) y las demás características habituales (precio, tamaño, fabricante, etc.). De esta forma conseguiremos un aparato respetuoso con el medio ambiente que nos acompañara un mínimo de 10 años.
Si deseamos conocer algunos modelos antes de ir la tienda, podemos consultar la base de datos que nos facilita el IDAE sobre la elección de los electrodomésticos más eficientes, es decir con las etiquetas A, A+ y A++. Esta base de datos nos permite obtener datos concretos sobre varios tipos de máquinas: frigoríficos, frigoríficos-congeladores, congeladores, lavadoras, lavavajillas, lavadoras-secadoras, secadoras, hornos, encimeras de inducción y las encimeras de gas.
Foto de Arizona Prestige
Actualización: este artículo fue modificado el 29/11/2012 para actualizar la foto sobre el etiquetado energético e incluir el nuevo modelo de etiquetas